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Algunos apuntes sobre la unión dinástica de la RR.CC.

1. La Unión de Castilla y Aragón en 1479 como consecuencia del matrimonio en 1469 de IsabelI de Castilla y Fernando de Aragón, fue una unión puramente dinástica y no una unión nacional.

2. El régimen de los Reyes Católicos respetó las instituciones y organismos propios y distintos de las Coronas que lo integraron (Castilla, Aragón y desde 1512, Navarra).
  • Se mantuvieron instituciones, aduanas y monedas separadas.
  • En Aragón: Las Cortes separadas, la Generalitat y las diputaciones permanentes, así como los fueros (conjunto de disposiciones jurídicas de origen consuetudinario – a veces derecho público, a veces derecho privado – que regulaban la administración territorial a escala regional) permanecieron hasta las leyes de Nueva Planta (1707-1715). En Navarra las Cortes y los fueros subsistieron hasta la conversión del reino en provincia en 1841. Los fueros de Vizcaya, Guipúzcoa y Álava subsistieron hasta su abolición en 1876.
3. Los Reyes Católicos no adoptaron el título de reyes de España: se titulaban “rey e reyna de Castilla, de León, de Aragón, de Sicilia, de Toledo, de valencia, de Galicia, de Mallorca, de Sevilla, de Cerdeña, de Córdoba, de Córcega, de Murcia, de Jaén, de los Algarves, de Algeciras e de Gibraltar e de Guipúzcoa, conde e condesa de Barcelona, e señores de Vizcaya e de Molina, duques de Atenas y Neopatria, condes de Rosellón y de Cerdeña, marqueses de Oristán e de Gociano”.

4. La unión de las Coronas fue constitucionalmente frágil. Aragón y Castilla se volvieron a separar a la muerte de Isabel en 1504, cuando la corona pasó a Juana y Felipe el Hermoso. Solo circunstancias fortuitas y accidentales hizo posible de nuevo la unión: la muerte de Felipe el Hermoso y la locura de Juana, y la muerte de Juan hijo de Fernando el católico y germana de Foix heredero al trono de Aragón en 1507.

5. Pero la unión de Castilla y Aragón fue más que una reversible y vulnerable unión personal:
  • La Unión no fue un hecho inesperado: distintos factores anticiparon y prepararon la unión. Factores de unidad fueron la religión, la historia (hay un concepto vago de España en la Edad Media), la lengua (más bien no fue un obstáculo) y sobre todo los intereses dinásticos (los Trastámara – grandes magnates castellanos- , que pusieron orden y frenaron los conflictos internos)
  • La unión cristalizó en importantes proyectos en común: la expansión territorial en Italia, Norte de África y el Atlántico.
6. La hegemonía castellana resultó inevitable (por su peso demográfico y económico), pero la unión parecía convenir tanto a los intereses comerciales, ganaderos y marítimos de Castilla, como a las necesidades de defensa y seguridad de Aragón, incapaz por si sola de mantener su poder en Italia. Además Castilla es una expresión altamente engañosa, en 1492 Castilla era Galicia, Asturias, León, Vizcaya, Álava y Guipúzcoa. Ambas Castillas, Extremadura y Andalucía Occidental.





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